Marco Aray
“Me gestaron en Colima pero me vinieron a echar acá en el último mes. Soy orgullosamente santiaguense, nacido en Santiago Ixcuintla y venido a criar aquí a Tepic. Tengo un amor y un cariño que no se me acaba por Santiago, ahí dejé el ombligo. No crecí ahí pero de ahí es mi abuela materna, mi infancia la ubico allá todos los fines de semana. De Santiago sale mucho talento. Yo fui criado mis primeros trece años en Tuxpan; con esto que acaba de pasar del desbordamiento del río perdimos el ochenta y cinco por ciento del patrimonio familiar. Ahora no hay rastro de ese Marco que vivió en Tuxpan trece años, todos esos trece años de vida en juguetes, libros, diplomas y cosas mías se fueron con el desastre. Soy hijo único, mis dos hermanos fallecieron. Me quedé yo, y lo que hicieron mis papás todas las tardes fue vincularme a que no echara a perder la vida. De niño aprendí a tocar instrumentos que ahora no toco, fui a clases de pintura y de danza. Siempre me gustó la poesía y la oratoria, siempre tuve el gusto por las disciplinas artísticas y es lo que he retomado. A partir del año catorce viví en Tepic, aquí estudié la preparatoria. Quería aprender en aquel entonces inglés y computación, cosas que en donde estaba no había avanzado mucho el asunto. Me metí a comunicación pero no egresé porque después me entraron otros rollos. Estudié filosofía dentro de un seminario católico. Me aventé dos años de teología también; no descarto en otra etapa continuar con esos estudios, me llama mucho la atención el cómo la Iglesia como institución puede aportar herramientas para la conciencia humana. Me tocó participar en un cortometraje con Sergio Tovar en 2004, empecé como jalacables y ahí confirmé que yo tenía un amor inhato por esta cuestión artística y en concreto el cine. En ese entonces me sentí muy chico y lo callé y lo oculté; me dieron la oportunidad y la patadita de la suerte. Cuando dejé los estudios sacerdotales tuve que replantearme qué hacer con mi vida. No estaba grande, pero tampoco muy chico. Decidí irme a Querétaro porque Nayarit entonces no tenía muchos espacios culturales, no era un lugar que me permitiera darle más a las a las alas que traía. Busqué universidades y en Querétaro encontré una muy buena que me permitiera estudiar para ser actor y poder también gestionar proyectos. Estudié la carrera de actuación profesional, pero más que actuar me he encaminado en la línea de la producción que es a donde me han invitado a participar. La cuestión de la organización, el rollo de trabajar con gente, la idea creativa y de más. En este tiempo fui invitado a participar para ser el coordinador artístico del Festival Cultural Amado Nervo en su edición dos mil dieciocho, por eso regresé a Nayarit. Comencé esta cuestión artística en dos mil quince; estos cuatro años han sido tan generosos. Vivo en Querétaro pero estoy por regresar a la Ciudad de México porque vienen ahí unos proyectos de grabación de dos películas para este año. Soy un desconocido en Nayarit; Queretaro ha sido el estado que me ha abierto las puertas. Tengo siete obras de teatro, una de ellas escrita por mí que presenté en dos mil quince en mi debut como dramaturgo. He hecho comerciales y publicidad para algunas empresas en la cuestión industrial y algunos cortometrajes para la UAQ. Estoy en este momento en una etapa de mi vida en la que busco consolidarme de una manera más sólida en el ambiente de la producción audiovisual y en la línea de la cinematografía. He tenido a bien participar ya en dos o tres películas, en una serie de televisión y algunos cortometrajes. En la búsqueda de la línea de la actuación se me dio la cuestión de escribir, estudié filosofía, me gusta la literatura y pues ahí he visto mi fuerte. El arte es mi pasión, es lo que más me llena, la cultura desde cualquier perspectiva. Este año salto al mundo de la fama con mi ópera prima, un cortometraje que grabamos en dos mil diecisiete y en el que debuto como guionista, director y coproductor. Ya estamos en las últimas cuestiones, esperamos festivalearlo.”
Marco Aray, 32 años
Actor y gestor cultural
Él es #nayaritadelcentenario
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